Valorizado por su aporte al diseño dinámico y elegante, que rompe con la rigidez de la línea recta, este producto ofrece un gran espectro de posibilidades tanto en interiores (muebles, barandas de escalera, baños) como en exteriores (fachadas de edificios, bóvedas, barandas, ascensores panorámicos).

Se pueden procesar, entre otros, cristales de color, reflejantes o fantasía de distintos espesores. Sus propiedades físicas de resistencia son el doble que las de un cristal común.

Método de fabricación de Cristal Curvado

Para obtener la curvatura, el vidrio pasa por el horno y allí adopta la forma proporcionada por la matriz de acero.

Luego, a diferencia del templado, se lo deja enfriar lentamente para evitar tensiones internas que alteren su estructura molecular. El resultado es un producto libre de distorsiones que garantiza una perfecta visión.

Como toque decorativo, suele usarse esmalte vitrificable de distintas tonalidades.